#ProfesMECOPH Albert Lladó: «Una buena conversación puede ser el espectáculo más bello del mundo»
Albert Lladó (Barcelona, 1980) es nuestro flamante nuevo profesor de la asignatura Retórica y Estilística de la comunicación. Es editor de Revista de Letras y escribe en La Vanguardia. Es autor, entre otros títulos, de las novelas Malpaís y La travesía de las anguilas (Galaxia Gutenberg, 2022 y 2020), del ensayo La mirada lúcida (Anagrama, 2019) y de la obra de teatro La mancha (Teatre Nacional de Catalunya, 2015).
También es profesor de Escritura Creativa en la Escola d’Escriptura del Ateneu Barcelonès, de Estudios Culturales y Críticos en la Escola Massana, y coordina, junto a Marina Garcés, la Escola de Pensament del Teatre Lliure.
Soy Albert Lladó, nací en Barcelona en 1980, y siempre he trabajado en torno a la palabra: desde la filosofía, el periodismo, el teatro y la narrativa de ficción. La pregunta, creación e interpretación son mis herramientas de trabajo. La perplejidad y la curiosidad, las pulsiones que hacen que viva mi trabajo como el mejor que podría haber elegido.
Mi ocupación favorita es… Una buena conversación puede ser el más bello espectáculo del mundo. Es, a la vez, ancestral y nuevo cada vez.
En mis clases del máster nos adentraremos en el arte de la persuasión y en la ciencia del discurso. Durante el curso estudiaremos la evolución histórica de una disciplina que, aunque en sus inicios tuviera como dramaturgias principales el tribunal, la asamblea o el templo, actualmente protagoniza la mayor parte de los escenarios de la palabra pública. ¿Qué es un hilo de twitter sino el intento de captar la atención, a través del argumento o de la emoción, de una audiencia que vive rodeada de ruido? ¿Qué espacios de la persuasión puede ocupar, aquí y ahora, un periodismo que no renuncie al rigor? ¿Cómo convocamos una imaginación que se reivindica como lo opuesto al fraude o la fantasía?
Lo que más me gusta del máster es que se acerca a la palabra desde el rigor y el riesgo a la vez, haciendo del lenguaje una forma de conocimiento que va mucho más allá de la simple literalidad. La mirada humanística del periodismo es imprescindible en un mundo en el que todo parece que puede ser capturado por el algoritmo. El lenguaje nos sirve para comunicar conceptos e ideas pero también para resignificar nuestros mundos.
Mi autor o de referencia es, por citar solo uno: Albert Camus. En él se concentra lo que más me interesa: el antidogmatismo, la ambición literaria, la honestidad intelectual, el compromiso con la libertad, la vulnerabilidad compartida y la incertidumbre como herramientas de pensamiento.
Un personaje literario con el que me identifico es… Uno quisiera ser «La Maga» a veces, y a veces Horacio Oliveira. Pero los personajes de Rayuela, Cortázar, podrían ser un buen ejemplo de nuestras contradicciones.
La última vez que me he emocionado con un libro… No sé si es emoción. Pero hace poco he leído a la Recherche de Proust. Y es la constatación de que, con la palabra, y también con la mirada, se pueden construir catedrales.
Si sólo pudiera salvar un libro del apocalipsis sería uno que fuera todo menos apocalíptico.
Un libro para recomendar al alumnado es Zona de obras, de Leila Guerriero. Creo que hay muchas de las cosas de las que hablaremos en el máster, desde un lugar a veces intuitivo, a veces pragmático, a veces poético.
Un deseo para el futuro… Que no renunciemos al deseo.